Tengo la suerte de colaborar en el “Proyecto Inicia” de la Fundación Rafael del Pino desde hace algunos años y me da la oportunidad de tener múltiples encuentros con jóvenes desde 15 hasta 21 años, en distintos colegios e institutos públicos y privados de enseñanza primaria, secundaria y formación profesional, donde trato de transmitirles cuáles son los elementos más importantes para enfrentarse al mundo profesional del futuro.
Como ya pueden conocer por artículos o conferencias anteriores, siempre me interesó el futuro. El futuro del mundo, pero más concretamente el futuro de las empresas y de la sociedad y siendo muchísimo más concreto, cómo deberían ser las personas que trabajarán o dirigirán ese futuro.
En el encuentro con estos estudiantes, les hablo de tres paradigmas que con toda seguridad se van a encontrar cuando hayan pasado al menos 10 años…, en los que ya estarán o casi, incorporados en el mundo del trabajo.
Les sugiero que, si quieren, cuando se acuerden, que tomen nota de estos tres paradigmas, los escriban en un papel, los metan en un sobre y que pongan: abrir en la misma fecha del día del encuentro con ellos, pero diez años más tarde.
Si alguno encuentra ese sobre dentro de diez años, lo abre y lo relee, se acordará de un tipo calvo que vino al colegio o al “insti” y les dijo esas cosas que podrán comprobar como ciertas.
El primero: Habrá trabajo para todos
No tiene sentido que seamos negacionistas con respecto al mundo del trabajo. Es cierto que, dentro de 10 años habrá más robots que trabajadores, más ordenadores que cerebros humanos y más abuelos que nietos, sobre todo en los países occidentales, donde la población activa, cada vez se reduce más y tiene que soportar un alto incremento de las personas jubiladas, que no productivas.
Cuando aparecieron las revoluciones agrarias, industriales, tecnológicas, etcétera, el mundo pensó que en lugar de progreso iban a generar desempleo y realmente lo que ocurrió fue todo lo contrario.
Pongamos algún ejemplo actual: Amazon en el año 2016 duplicó el numero de robots de carga par agilizar sus operaciones en EEUU cuya consecuencia sería la reducción de 15.000 empleos. Sin embargo, ocurrió lo contrario, contrató a un 50 % más de gente en el mismo periodo y anunció la creación de 100.000 nuevos empleos en los siguientes 18 meses. En el año 2020 solamente por el impacto de coronavirus en EEUU se contrataron 100.00 trabajadores más. En España en el mismo periodo han contratado 2.000 personas más. Lo mismo ha ocurrido con otras grandes compañías tecnológicas del mundo que han crecido no solamente en empleos directos, sino también en indirectos.
Según el World Economic Forum, en el informe titulado “The future of Jobs 2020” donde participan más de 300 empresas mundiales una de las conclusiones, entre otras, dice: “la automatización y una nueva división el trabajo entre los seres humanos y las máquinas desplazarán a 85 millones de empleos en todo el mundo en empresas medianas y grandes de 15 industrias y 26 economías”, y también “el aumento de la presencia de máquinas y robots pueden permitir la aparición de otros 97millones de puestos de trabajo en las áreas que formarán la cuarta revolución industrial”.
Pero el trabajo ya no será el mismo que hemos vivido hasta ahora. Ya no habrá un trabajo fijo para toda la vida (que se lo pregunten a los empleados de banca), ya no habrá un horario, ni una jornada como hasta ahora la hemos conocido. Un trabajo será el principal, habrá otros accesorios o complementarios y de distinta índole y por supuesto, la mayoría de trabajos no serán en la misma ciudad o país donde uno reside.
Y no debemos olvidar que las personas mayores son grandes consumidores y con mayor poder adquisitivo, que aumentaran la demanda del mercado, donde por cierto el principal mercado de consumidores de clase media en la actualidad son Estados Unidos y Europa occidental, pero en los próximos años decrecerán y se impondrán una gran clase media proveniente de Asia, incluida India y de África.
Es decir, como conclusión, trabajo sí, para el que quiera trabajar, pero de distinta manera de como lo concebimos hasta ahora.
El segundo: En la mayoría de los casos, sus estudios actuales, poco o nada tendrán que ver con sus profesiones.
Hasta ahora el ciclo normal de la vida consistía en infancia, estudio, trabajo y jubilación. Sin embargo, la irrupción de unos nuevos modelos de vida, diferenciado en muchos casos, donde la realidad virtual, la inteligencia artificial, la robótica y nuevos desarrollos harán que la adaptación al trabajo requiera una formación permanente en lo relacionado con nuestros trabajos u oficios, teniendo que volver periódicamente a la escuela o a los centros de formación, generalmente online, para actualizarnos o adquirir nuevas competencias. Es decir, el ciclo infancia-estudio-trabajo-jubilación se convertirá en infancia-estudio-trabajo-estudio-trabajo-estudio-estudio- ¡trabajo y posiblemente jubilación, pero de esto último no estoy tan seguro.
Pongamos algún ejemplo: Moshe Shoham, director del instituto de robótica de la Technion en Israel, es uno de los hombres que están reinventado la medicina. Entre los muchos inventos, con un grupo de estudiantes de doctorado, diseñaron un robot para detectar filtraciones de agua y desatascar las tuberías de las ciudades. Un amigo profesor de neurocirugía Mensahe Zaaroor le propuso por qué no hacer eso mismo, pero con robots en miniatura para destapar los conductos del cuerpo humano. Tiempo después fundaron Microbots Medical donde diseñan y fabrican estos microrobots. ¿Ingeniero? ¿Tecnólogo? ¿Médico? ¿Neurocirujano? ¿Físico? ¿Biotecnólogo? o ¿un poco de todo?
Llevado a otros oficios, veremos como la evolución de las tecnologías y de los mercados, necesitaran un aprendizaje permanente que hará que las profesiones se parezcan realmente en poco o en nada a como hasta ahora las habíamos conocido. Desde el comerciante de barrio que deberá manejar sus páginas web, medios de pago online, almacenamiento, distribución y gestión de compras y stock, hasta los ingenieros, médicos, docentes, transportistas, abogados o simplemente la modificación de hábitos y conocimientos en la gestión del hogar.
No hay que olvidar, que la base del conocimiento y de la formación unidos a la capacidad de aprendizaje, son los pilares del desarrollo profesional de las personas y eso se aprende durante la primera etapa de vida en el colegio, instituto o Universidad, pero de nada o poco servirán si no se actualizan de manera permanente adaptándose a la realidad profesional que se requiera en cada momento y no podemos ser ajenos a la rápida evolución del mundo, de la sociedad, del consumo, de la investigación.
El tercero: La empresa en la que van a trabajar. La gran mayoría todavía hoy no existe y muchas las crearán ellos mismos
Las empresas líderes de hoy difícilmente serán las líderes de mañana. Si miramos el top 10 de las empresas actuales y lo comparamos con el de hace 10 años, comprobaremos que solamente dos han permanecido a la cabeza: Microsoft y Google. El resto han sido reemplazadas por empresas chinas y estadounidenses, en su mayora tecnológicas, extremadamente complejas y de enorme tamaño, con un valor que supera en algunos casos al billón de dólares. Y dentro de otros 10 años muchas de estas empresas tampoco mantendrán su posición en el podio porque bien habrán sido divididas por negocios o formarán parte de otra gran compañía.
Pongamos algún ejemplo: ADOBE. Pasó de ser un negocio dedicado al desarrollo de software a uno dirigido a la creación de experiencias digitales, marketing, plataforma de comercio y análisis de datos, al tiempo que transformó su tradicional negocio de software a suscripciones en la nube (ingresos anuales 9.000 mm de €), pero lo más importante es que el 88 % de sus ingresos proviene de suscripciones).
Amazon: Todo el mundo conoce esta compañía como operador logístico. Pero también tiene un servicio en la nube A.W.S. para reducir el costo de la infraestructura requerida para sus operaciones (ingresos anuales US$ 232.900 millones). Crecimiento de ingresos entre 2009 y 2018, 850 %. Año 2020 A.W.S. factura más de un 20% de los ingresos actuales con un margen operativo que supera el 30 % y sigue creciendo.
¿Cuánto tiempo tardará Amazon en vender o segregar el negocio logístico y centrarse en A.W.S?
Google, Intel, eBay, Facebook, Linkedin y Tesla tienen tres cosas en común: han transformado la economía mundial, sus fundadores o cofundadores eran inmigrantes y todos comenzaron con emprendimiento.
Hasta el año 2016 personas inmigrantes y emprendedores, crearon 44 de los 87 “unicornios” de EEUU. 23 de los 44 inmigrantes que fundaron esas 44 empresas fueron a Estados Unidos a completar sus estudios universitarios y la mayoría eran originarios de países como India, Canadá, Reino Unido, Alemania o Israel.
En España, antes de la crisis del 2008, 8 de cada 100 personas se lanzaban a crear un negocio. En el año 2019 etapa pre COVID-19 eran 6 de cada 100 personas. Durante la época COVID, año 2020 los emprendedores se han multiplicado y lo hacen fundamentalmente por reinventar su negocio frente a nuevos mercados de consumidores, o crean nuevos negocios para ganarse la vida porque el trabajo y el consumo se ha reducido dramáticamente. El perfil del emprendedor está en torno a los 35 años con estudios universitarios y un dato muy importante, es la entrada en el mundo del emprendimiento de las mujeres, por cada varón emprendedor hay una mujer emprendedora y esta tendencia seguirá aumentado en los próximos años ¡ojo! según el profesor Mauro F. Guillén de Wharton School, las mujeres dominarán el mundo, porque cada vez determinan más lo que ocurre. Pero es un tema para otro artículo.
Hay que entender que ser emprendedor no es un oficio, sino más bien identificarlo como una actitud. Emprender para crear algo nuevo que no exista, reinventar lo que existe y esto se puede hacer partiendo de cero o dentro de una empresa.
Existen multitud de oportunidades para emprender en España y en el mundo y es ahora en tiempos de crisis donde se hacen los mejores negocios y donde existen las necesidades que agudizan el ingenio para sembrar el éxito de las empresas del futuro.
En fin, espero que alguno de los jóvenes del cole o del “insti” encuentre el sobre dentro de 10 años.
Fuentes consultadas:
- Estudiando las pirámides poblacionales y las tendencias para los próximos años publicadas por distintos organismos nacionales (INE) o internacionales
- Banco mundial o encuestas de población según Naciones unidas (www.un.org-sections,issues.depth-population).
- Los grandes retos del siglo XXI .E. Ontiveros y M. Guillén.
- World Economic Forum 2020
- Unicornio : empresas privadas valoradas en mas de 1.000 millones de dólares.
- Informe: National Foundation for American Policy
- Datos informe GEM 2019-2020