En esta ocasión, New Medical Economics ha tenido la oportunidad de entrevistar a tres profesionales del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, referente en la región cántabra. Los expertos han hablado sobre sus retos y la adaptación de los servicios que dirigen a la nueva realidad impuesta por la COVID-19. El Dr. Cifrián destacó la importancia de las terapias respiratorias domiciliarias, por su parte, Ramón Díez la gestión de oxígeno y otros gases medicinales en la atención de los pacientes COVID y Jesús Martín subrayó la creación de la UCI COVID que se creó durante la pandemia.
José Manuel Cifrián, jefe de Servicio de Neumología
¿Con cuántos profesionales cuenta el equipo que lidera?
En este momento el Servicio de Neumología cuenta con 19 neumólogos y 50 enfermeras. Existe un jefe de Servicio y un jefe de Sección.
¿Cuáles son sus líneas estratégicas para liderar un Servicio de Neumología de calidad?
El Servicio de Neumología ha realizado desde hace años una apuesta por la calidad en todos sus frentes. En este momento es centro CSUR (de referencia) para trasplante pulmonar, Unidad de Enfermedades Pulmonares Intersticiales, Unidad de EPOC, Unidad de Sueño y Ventilación (todas ellas de alta complejidad con nivel de excelencia acreditada por la Sociedad Española de Neumología SEPAR). El programa de trasplante pulmonar realiza auditorías internas y externas anuales y cuenta con la certificación ISO 9001:2015. Además, el Servicio ha optado a formar parte de la Red Europea de Enfermedades Raras (ERN-Lung) en los campos de la fibrosis pulmonar, hipertensión pulmonar y disfunción crónica del injerto en trasplante pulmonar.
Por tanto, la apuesta por la calidad es nítida y esperamos ampliar el espectro a la Unidad de Asma Grave.
¿Podría describir los retos principales a los que se enfrenta el Servicio en su día a día?
El reto fundamental durante todo este año ha sido compatibilizar la atención a los pacientes con neumonía por COVID-19 (hemos atendido a más de 1.500) con el mantenimiento de todos los programas que teníamos en marcha, sin que se produzcan retrasos en la atención al paciente, especialmente aquellos que aquejan patologías crónicas y en el diagnóstico rápido de neoplasias pulmonares.
¿Qué necesidades tiene en estos momentos el Servicio de Neumología para seguir desarrollándose? (profesionales, formación, equipamientos, ensayos clínicos, medicamentos innovadores, …)
En estos momentos el Servicio de Neumología precisa la puesta en marcha de una Unidad de Cuidados Respiratorios Intermedios (UCRI), que es completamente necesaria para ofertar Ventilación no Invasiva con garantías a los pacientes que no precisen traslado a UCI o no esté indicado. Se ha visto su necesidad durante la pandemia y prácticamente todos los Servicios de Neumología del país la han creado o reforzado en este último año y medio.
Es importante también contar con buenas instalaciones de endoscopia respiratoria para garantizar el máximo confort y seguridad del paciente.
Es evidente que pandemias como la que estamos viviendo han hecho necesario más neumólogos en los Servicios. Contamos con guardia de Neumología y creo fundamental la participación de los residentes de Neumología en las mismas por encima de otras necesidades organizativas.
¿Cómo se ha adaptado el servicio de neumología a la nueva situación que ha provocado la COVID-19?
Se ha adaptado con un enorme esfuerzo de todo el equipo y con gran resiliencia ante las dificultades que ha ido viviendo, entre ellas el cambio de la planta de hospitalización de Neumología hasta en una docena de ocasiones con lo que ello conlleva desde que empezó la pandemia. Ha habido que profundizar en telemedicina y paulatinamente hemos retomado el contacto presencial con casi todos nuestros pacientes.
¿Se han producido cambios significativos en la estructura u organización del Servicio que permanecerán?
Ha habido que formar parte de equipos COVID, ha sido necesario crear una consulta para seguimiento de los pacientes con neumonía por COVID, se han modificado los protocolos para realización de pruebas de función respiratoria y broncofibroscopia. Pienso que todas estas estructuras permanecerán en el tiempo.
¿Cómo funcionan las terapias respiratorias domiciliarias? ¿Qué beneficios tienen? ¿Cuántos pacientes las utilizan en este momento?
Las terapias respiratorias domiciliarias incluyen tratamientos con oxigenoterapia y ventilación no invasiva fundamentalmente. En la actualidad tenemos a 1.190 pacientes con oxigenoterapia y 9.579 pacientes con ventilación no invasiva.
¿Qué balance hace de su labor como jefe del Servicio de Neumología del HU Marqués de Valdecilla?
Mi labor ha sido y seguirá siendo formar un equipo compacto capaz de especializarse en diferentes áreas de la Neumología con un compromiso nítido con los pacientes y con la calidad, comprometido con la docencia y la investigación y capaz de abordar cualquier emergencia sanitaria como la que se ha vivido en los últimos tiempos.
Y todo ello de la forma más discreta y sencilla posible, poniendo el foco en el grupo por encima de la persona que eventualmente dirija un servicio.
¿Qué nuevas acciones/medidas podrían mejorar la actividad del Servicio de Neumología?
Tal y como contesté anteriormente, la creación de una UCRI, la formación de los residentes también en las guardias de Neumología, la mejora en los espacios y medios para realizar técnicas diagnósticas, las mejoras en las políticas de contratación y el reconocimiento del esfuerzo realizado por el equipo en toda la pandemia COVID serían en este momento las mejores acciones que se pudiera dar en beneficio de todos.
Ramón Díez, jefe de Servicio de Mantenimiento
Jesús Martín, director Económico
¿Podrían hacernos una descripción del funcionamiento del Servicio de Mantenimiento del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla?
Ramón Díez: El Servicio de Mantenimiento del Hospital está sometido a un CPP (convenio de colaboración público-privada), es el que ahora está vigente en el hospital. Hay una empresa adjudicataria que, entre otros servicios, tiene el mantenimiento general. Tenemos un sistema mixto con personal estatutario y con personal laboral de la empresa, por lo que convivimos con esos dos tipos de personal. Dentro del personal estatutario el Servicio de Mantenimiento está encabezado por un subdirector, luego estoy yo, el responsable de mantenimiento después viene todo un grupo de ingeniería y los jefes de grupo de los diferentes talleres. También hay talleres de calefactores eléctricos, pintores, albañiles, fontaneros, mecánicos, etc., que son los que sirven para los diferentes oficios, dependiendo del tipo de actuación. Todo esto está apoyado por un personal de gestión y administrativo. Es así como como lo tenemos configurado.
¿Qué podéis contarnos de la UCI COVID que se creó en el H.U. Marqués de Valdecilla durante la pandemia?
Jesús Martín: Sentimos la llegada de la pandemia a través del número de ingresos, que aumentaba diariamente, ocupando las camas UCI que teníamos hasta ese momento en el hospital. Lo primero que hicimos fue adaptar las infraestructuras con las que ya contábamos y ahí el Servicio de Mantenimiento colaboró de forma excelente. Cada vez que teníamos que adaptar una infraestructura, modificar circuitos, habilitar entradas y salidas independizadas para pacientes COVID positivo, crear zonas de esclusa para los profesionales, etcétera, el Servicio de Mantenimiento contribuyó de manera sustancial. Y viendo que aun así la demanda de espacio seguía creciendo, abordamos dos líneas de trabajo.
Diseñamos una nueva UCI COVID de forma urgente en uno de los antiguos pabellones del hospital. Queríamos ganar nuevo espacio para atender a los pacientes críticos con COVID-19 sin dejar de asistir al resto de pacientes que necesitaban operarse o recibir un trasplante y requerir por ello de una cama UCI no COVID. Desde el área de Gestión, siempre en colaboración con el Servicio de Mantenimiento y los profesionales asistenciales, se tramitaron contratos de emergencia para poder adjudicar todo ese equipamiento en coordinación con los diferentes adjudicatarios para poder trabajar de manera ágil. El objetivo era crear una nueva UCI que fuera lo más versátil posible, de tal manera que después de la pandemia pudiera adaptarse a las necesidades que tuviera el hospital, ya fuera como Unidad de Cuidados Intermedios adscrita al Servicio de Medicina Intensiva o convertirse en una nueva área de hospitalización convencional.
A la vez, convertimos en UCI COVID otro de los antiguos pabellones del hospital que funcionaba como laboratorio. El Servicio de Mantenimiento adaptó todas las instalaciones para las tomas de oxígeno y también tuvimos mucha ayuda de Enfermería. Gracias a la colaboración conseguimos tener disponible esa nueva UCI en un plazo de sólo dos semanas, lo que nos ayudó de forma importante a afrontar la situación hasta que se concluyó la que hoy en día se ha mantenido como UCI COVID.
¿Cómo se coordina con el resto de los servicios que conforman el Hospital?
Jesús Martín: La coordinación con el resto de servicios es mediante las direcciones correspondientes y los mandos intermedios. Nosotros hacemos reuniones periódicas y continuas para establecer las necesidades. Mantenimiento es un servicio facilitador para responder a las necesidades que puedan tener los servicios asistenciales, tanto la Dirección de Enfermería como la Dirección Médica. Lo que tenemos que intentar es facilitar su trabajo y para ello mantenemos una coordinación continua.
¿Cuáles son los puntos críticos del Servicio de Mantenimiento?
Ramón Díez: Nosotros tenemos puntos críticos con la contratación administrativa en la adjudicación de contrato, sobre todo en los tiempos que corren. Y también con la política de personal, necesitamos tener los perfiles necesarios para realizar todas las tareas que el Servicio de Mantenimiento conlleva, que cada día son más especializadas.
Jesús Martín: Necesitamos ingenieros o ingeniería con perfiles. También entendemos que la Ley de Contratos del Sector Público no está preparada para Sanidad. Creo que debería de haber una Ley solo exclusivamente para Sanidad. Las necesidades que nosotros tenemos en el hospital no son como las que tiene cualquier ayuntamiento de un pueblo como el mío o las que pueda tener otro ente público.
- El desabastecimiento de EPIs, medicamentos y productos sanitarios fue un grave problema en los primeros meses de la pandemia, ¿el Servicio de Mantenimiento se vio afectado?
Ramón Díez: No, nosotros no tuvimos desabastecimiento. Llevamos un sistema de gestión que empezó el Servicio Cántabro con compras masivas y se reguló y se controló, y se gestionó, sobre todo, el reparto de EPIs, que fue a personal. Pudimos pasar los primeros tiempos, que fueron los más duros, hasta que ya sí que masivamente empezaron a llegar por todas partes.
Jesús Martín: Una vez que íbamos viendo cómo iba la COVID en Madrid, tuvimos mucho apoyo de voluntarios, de gente que donaba mascarillas y otros EPIs y que se volcaron con el hospital. La empresa privada aportó mucho. También tuvimos mucha colaboración ciudadana, muchas personas voluntarias estaban en la puerta del hospital entregando material para poder paliar la situación a nivel global.
Dada la vital importancia que tuvo el oxígeno y otros gases medicinales en la atención de los pacientes COVID, ¿tuvieron algún problema en la gestión de estos? ¿se tuvieron que realizar actuaciones específicas? (ampliaciones de suministro, instalaciones nuevas, etc.)
Ramón Díez: Sí, tuvimos que tirar de todas las líneas de gases para las dos UCIs. Y gracias a Dios la instalación que tiene este Hospital estaba muy bien sobredimensionada para poder dar los flujos en los diferentes puntos. Ya en ningún momento hubo desabastecimiento en el tanque de oxígeno en el Hospital.
¿Algunas medidas/actuaciones especiales se quedarán instauradas como medidas preventivas de actuación o se han diseñado/diseñarán nuevas estrategias teniendo en cuenta la premisa de que este tipo de virus ‘ha venido para quedarse’?
Jesús Martín: Sí, desde el punto de vista de mantenimiento o de ingeniería, lo más importante es tener estancias o locales versátiles que sean capaces de adaptarse a las necesidades que vaya teniendo el hospital. Eso tiene que ir siempre acompañado de un equipo de contingencia en el área de Recursos Humanos, porque debemos tener la capacidad de poder contratar en base a las necesidades de una forma rápida, en función de cómo vaya viniendo la situación, ser capaces de adaptar la infraestructura y capaces de tener una contratación ágil para poder dar servicio al ciudadano, que al final es lo que a nosotros nos interesa.
¿Qué nuevas acciones podrían mejorar la actividad y servicio que presta actualmente el Hospital? ¿Y respecto al Servicio de Mantenimiento?
Ramón Díez: Básicamente son las herramientas que nos permitan gestionar de una manera más eficaz el Servicio en todas las áreas informáticas
Jesús Martín: Sí, a partir de ahora tenemos que tender a la implantación de inteligencia artificial, de Big Data, Internet de las cosas, sensorizar el edificio para tener una toma de datos y poder sacar conclusiones e intentar ser eficientes en los procesos acompañado de una política de organización industrial dentro del hospital. Todo eso nos va a ayudar para poder tomar decisiones que nos permitan ser eficientes hacia el objetivo de llegar a ser un hospital inteligente.
Para el ‘nuevo futuro’: ¿alguna recomendación para el Hospital, el Servicio, otros servicios, …?
Ramón Díez: Necesitamos aumentar las titulaciones específicas para el Servicio de Mantenimiento, poder abrir la política de personal y también que se reconozca la importancia y la trascendencia que tiene el Servicio de Mantenimiento dentro de los hospitales.
Jesús Martín: Eso que dice mi compañero es lo básico. Al ingeniero normalmente no lo conocía nadie, pero yo creo que hemos aportado un valor y muy importante. Ahora los profesionales asistenciales nos ven como un aliado, nuestro objetivo es ser facilitadores, porque tenemos herramientas que ellos no tienen. Ellos saben hacer muchas cosas, pero nosotros sabemos hacer otras y creo que tenemos que ser aliados e ir de la mano, estar integrados en todas las comisiones para poder aportar valor y desarrollar mucho mejor la función, que al final es el futuro. Ahora tenemos una batalla juntos y estamos bastante satisfechos y orgullosos del trabajo realizado.
También ha colaborado y ayudado mucho el servicio de almacén para el suministro de EPIs, del área de compras también, el servicio de informática… Al final ha sido toda el área de gestión la que se ha coordinado para dar el mejor servicio. Es una actuación conjunta. También quiero destacar la Enfermería, que nos ayudó muchísimo y es verdad que el Servicio de Mantenimiento cuando hicimos el área de la primera UCI tuvo un comportamiento ejemplar dándolo todo desde el primer momento. Se arremangó todo el mundo y me gustaría darles de nuevo las gracias por el esfuerzo realizado.