La artrosis (“osteoartritis” en los países anglosajones) es la enfermedad crónica de las articulaciones más común, que cursa con la degeneración del cartílago articular limitando la funcionalidad y calidad de vida de los pacientes y asociándose con diferentes grados de discapacidad, que van desde el dolor leve e intermitente con una dificultad mínima para realizar las actividades diarias, hasta el dolor crónico con daño estructural progresivo y pérdida de la capacidad funcional articular y autonomía. Esta situación puede acabar produciendo en los pacientes problemas de salud mental (deterioro de la autoestima, insomnio, ansiedad y depresión), fatiga y pérdida de calidad de vida. También se asocia a una mayor comorbilidad (cardiovascular, diabetes, etc.) que reduce considerablemente su esperanza de vida.
En el mundo hay más de 500 millones de personas afectadas y concretamente en España, somos más de 10 millones las personas diagnosticadas de artrosis. Según la última Encuesta Nacional de Salud (Julio 2018), realizada en población femenina a partir de los 15 años, el 23,5% de las mujeres españolas sufre artrosis. De hecho, más del 50% de las personas mayores de 65 años tiene artrosis.
La artrosis plantea un problema de salud pública enorme y creciente, que conlleva una enorme inversión presupuestaria. La artrosis genera, no solo costes directos, sino, también, indirectos considerables en el Sistema Nacional de Salud (SNS). Además de los costes asociados a la disminución de la productividad y laborales. Se estima que, la artrosis es una de las cuatro principales causas de discapacidad en todo el mundo. Las enfermedades reumáticas son hoy la primera causa de invalidez permanente y la tercera de incapacidad laboral transitoria, correspondiendo el 50% de las bajas a pacientes con artrosis. En 2012, se colocaron más de 93.000 prótesis de cadera y rodilla en España y las expectativas son, que este número aumente a la vez que aumenta la esperanza de vida. De hecho, el coste estimado de la artrosis para el sistema sanitario en España es de € 5.831 millones al año, el equivalente a 0.5% del PIB.
Hasta hace poco tiempo, esta enfermedad no era considerada como prioritaria en los sistemas de salud, pero como podemos ver, es un problema creciente lo que hace necesario optimizar todos los recursos disponibles.
Más del 50% de las personas mayores de 65 años tiene artrosis
Muchos son los falsos mitos alrededor de esa patología como pensar que se trata de una condición de la vejez, cuando si bien entre los factores de riesgo de la artrosis, destaca la propia edad; la predisposición genética; la sobrecarga de las articulaciones debida a la obesidad, excesiva actividad física, defectos en la escritura o posturales, etc.; enfermedades que alteran a las articulaciones como la osteoporosis, ciertas infecciones, la artritis, etc. Por ejemplo, enfermedades inflamatorias como la artritis reumatoide, de persistir, a largo plazo se acompañan de lesiones en el cartílago, produciéndose la dualidad artritis-artrosis.
Para su diagnóstico, es suficiente con la anamnesis, observación de los síntomas y la palpación, pudiéndose confirmar por radiografía simple, al hacerse visible un espacio articular disminuido, desalineación o deformidad ósea, etc. Por ello, es paradójico, que la duración media del diagnóstico ronde los 3 años, tal como quedó patente en el estudio CAVIPA promovido por OAFI.
Es mucho lo que se puede hacer por el paciente desde una perspectiva holística de la persona afectada, siendo preciso prevenir y ralentizar su evolución, aplicando la condroprotección, cambiando algunos hábitos de vida (establecer una dieta adecuada, reducir el peso, adaptar el ejercicio a la persona, etc.), mitigar la sintomatología (frente al dolor, sueño, etc.) y las comorbilidades (afectación emocional, patología cardiovascular, etc.), debiendo poderse acceder a los tratamientos farmacológicos y no farmacológicos suficientemente avalados; impulsando la investigación a pesar de ser esta una “enfermedad con poco glamour”.
Desde OAFI en colaboración con AECOSAR, se ha hecho una propuesta inicial con un comité experto multidisciplinar, a 3 niveles (población, pacientes y servicios de salud), que ha sido revisada y ratificada hasta el momento por 13 organizaciones científicas y profesionales de médicos, farmacéuticos, enfermería y otros profesionales de la sanidad, entre las que está SECA, SEAUS, SER, SECOT, SETRADE, SEMERGEN, SEMG, semFYC, SEFAC, SEIOM, SEMDOR, etc. … abiertos a nuevas incorporaciones.
Con este programa, se podrá reducir el coste de la enfermedad artrósica alrededor de unos 100 millones de euros, mejorando además la calidad asistencial de nuestros pacientes. Para mejorar el abordaje de la artrosis y optimizar los recursos, es imprescindible una actuación coordinada de las autoridades sanitarias, sociedades científicas y profesionales, organizaciones de pacientes y demás agentes involucrados, asegurando la buena coordinación entre los diferentes niveles asistenciales.
Desgraciadamente la pandemia de la COVID-19 ha interrumpido el proyecto, iniciado en octubre de 2018, pero que recientemente hemos reactivado tras ser presentado en el Senado el pasado 28 de septiembre de 2021, y en la actualidad, está siendo difundido por OAFI, AECOSAR y New Medical Economics a las consejerías de sanidad de las distintas comunidades autónomas, proponiéndose este nuevo modelo de gestión multidisciplinar para avanzar en el tratamiento de la artrosis optimizando recursos, lo que supone:
- Promover la participación de los pacientes y profesionales en las políticas de Salud, investigación y modelo de gestión.
- Formar y hacer participar al paciente de las decisiones que le afectan, haciéndolo responsable de su salud.
- Prevenir y acelerar el diagnóstico.
- Facilitar el acceso al tratamiento óptimo y avalado, farmacológico y no farmacológico.
- Tener presente la visión holística de la persona afectada y sus comorbilidades.
- Concienciar a las administraciones y opinión pública, del relevante papel de las organizaciones de pacientes, como recurso activo, que complementa la cartera de servicios, refuerza a los profesionales y produce un importante ahorro económico.
Josep Vergés Milano, Presidente y CEO de la Osteoarthritis Foundation International (OAFI)
Más autores: Manel, Santiñà Vila; María Teresa Vergés Milano; Carmen Sánchez Chicharro; Nina Martínez Fernández; y Jose Luis Baquero Úbeda.