El tiempo que perdemos
Pasamos mucho tiempo de nuestra vida en el trabajo y el tiempo es un recurso escaso, absolutamente inelástico, imposible de reemplazar y perfectamente socializado ya que todos tenemos la misma cantidad: 24h al día. La diferencia radica en cómo lo hacemos servir, en qué lo invertimos, a un ritmo constante de 60 segundos por minuto, pues no se puede almacenar ni recuperar. Combinando este hecho con la Ley de Parkinson, según la cual todo trabajo se dilata indefinidamente hasta ocupar el tiempo disponible para su completa realización, es el momento de buscar herramientas para conseguir la máxima eficiencia de nuestra plantilla. CONCEPTOS IMPRESCINDIBLES EN GESTIÓN DEL TIEMPO Erróneamente, tendemos