¿Qué sucede si se mezclan las vacunas COVID-19 y se recibe una primera dosis de una inyección y una segunda dosis de una inoculación diferente?
Existen varias especulaciones al respecto, por un lado, para proporcionar mayor flexibilidad al Gobierno, para poder utilizar todos los suministros disponibles entre toda la población y asegurar que no se desperdicien dosis y se pueda vacunar a mayor número de personas.
Por otro lado, se habla que, para algunas vacunas, recibir una segunda dosis diferente a la inicial podría producir una respuesta inmune más fuerte.
Varios expertos creen que lo más probable es que el Covid 19, se vuelva endémico, esto quiere decir que la población va necesitar poner “dosis de recuerdo” en el tiempo, para mantener la inmunidad.
“Es posible que las personas necesiten recibir las dosis de recuerdo o refuerzo de una vacuna diferente a la inoculada inicialmente”
Reino Unido ha sido uno de los primeros Gobiernos que ha realizado uno de los mayores ensayos clínicos de este cóctel de vacunas.
En las primeras observaciones se refleja que las personas que recibieron la vacuna AstraZeneca seguida de la inyección Pfizer o viceversa, tenían más probabilidad de experimentar reacciones incómodas a la segunda dosis que las personas que recibieron la segunda dosis de la misma vacuna.
¿Cuáles fueron los síntomas?
- Fiebre
- Escalofríos
- Nauseas
- Dolores musculares
- Letargo
- Malestar general
¿Con que intensidad se han clasificado?
Se han descrito como “leves o moderados”; con una corta duración de apenas unos días.
Y no se habían desarrollado otros problemas de seguridad hasta la fecha.
¿Cuál ha sido la reacción más frecuente y significativa?
El “absentismo laboral”, ha tenido un gran impacto en el personal debido a los efectos secundarios posteriores a la vacunación.
Este estudio se ha realizado a personas mayores de 50 años, por ello es posible que los más jóvenes reaccionen de distinta manera.
Existen países que incluso han creado una guía sobre las incapacidades temporales post vacunación COVID, proporcionando el derecho de dos días de incapacidad laboral a los trabajadores que lo necesiten post vacunación.
¿En qué consisten los estudios clínicos?
El estudio de las vacunas AstraZeneca y Pfizer involucró a más de 800 voluntarios reclutados en ocho sitios diferentes.
Los científicos ampliaron la investigación para analizar también las vacunas Moderna y Novavax, y se reclutaron 1.050 voluntarios más.
Estos voluntarios recibieron primero la vacuna AstraZeneca o Pfizer, seguida de la misma vacuna para su segunda dosis, o una dosis de las dosis de Moderna o Novavax.
AstraZeneca también está llevando a cabo un ensayo clínico para observar el efecto de mezclar dosis de su vacuna con la vacuna rusa Sputnik V.
Los científicos dicen que este tipo de combinación es posible porque la mayoría de las vacunas COVID-19 aprobadas para su uso hasta ahora provocan una respuesta inmune a la misma parte del coronavirus: “la proteína del pico”.
Los investigadores están particularmente interesados en ver si los regímenes de dosificación mixtos confieren una mejor respuesta inmune a las vacunas que usan un adenovirus modificado para dar instrucciones a las células del cuerpo para producir la proteína del pico.
Los científicos tienen la teoría que, después de la inyección inicial de las vacunas basadas en adenovirus, el cuerpo de una persona desarrolla una respuesta inmune al adenovirus, así como a la proteína del pico del coronavirus.
La vacuna AstraZeneca, la vacuna Johnson & Johnson y la vacuna Sputnik V utilizan cada una un tipo diferente de adenovirus
Esta respuesta inmune es problemática porque puede significar que cuando la persona recibe la segunda dosis de una vacuna basada en adenovirus, el sistema inmunológico ataca y desactiva el adenovirus, antes de que pueda entregar las instrucciones a las células del cuerpo para producir la proteína del pico del Covid19, haciendo la segunda inoculación menos efectiva.
Al usar un adenovirus diferente para la segunda dosis o una tecnología de vacuna diferente, se espera que esto se pueda evitar.
Este mismo problema no parece afectar a las vacunas, como las de Pfizer y Moderna, que usan ARN mensajero (ARNm) para entregar instrucciones a las células del cuerpo para producir la proteína de pico de coronavirus.
Ese ARNm se entrega encerrado en una pequeña envoltura de grasa, llamada nanopartícula lipídica, que el sistema inmunológico del cuerpo no parece reconocer como un invasor extraño, haciendo una segunda inoculación más potente.
Rita Rodríguez Fernández