Las UCRIS son unidades dirigidas por neumólogos equipadas para ofrecer Soporte Respiratorio no Invasivo (SRNI) a los pacientes sin necesidad de intubación orotraqueal (IOT).

 

Los hospitales de toda España están estos días aumentando exponencialmente su número de Unidades de Cuidados Respiratorios Intermedios (UCRIs) como una estrategia efectiva para aliviar o retrasar la saturación de las Unidades de Cuidados Intensivos. Las UCRIs ofrecen a los pacientes con coronavirus en los momentos más graves de la infección soporte respiratorio sin llegar a la intubación. “En las UCRIs, los neumólogos luchamos para ganar tiempo y que los pacientes no tengan que llegar a las UCIS y lo estamos consiguiendo tanto en pacientes mayores como en situaciones concretas de pacientes jóvenes” explica la Dra. Olga Mediano, neumóloga y coordinadora del Área de Sueño, Ventilación Mecánica y Cuidados Respiratorios Críticos de SEPAR.

Las UCRIs son unidades dirigidas por neumólogos dotadas de equipamiento específico que no tienen las habitaciones convencionales para dar a los pacientes soporte respiratorio no invasivo (SRNI), es decir, sin intubación. Este soporte se ofrece básicamente a través de oxigenoterapia de alto flujo, ventilación mecánica no invasiva (VMNI) y sistemas de CPAP. En el hospital de Guadalajara, donde trabaja la Dra. Olga Mediano han pasado estos días de 3 a 30 habitaciones equipadas como UCRIs y lo mismo está ocurriendo en la mayoría de los hospitales y centros sanitarios que o bien están creando o bien están ampliando sus camas de UCRI.

“Nuestro objetivo es ayudar a nuestros compañeros de intensivo ofreciendo una terapia respiratoria previa para intentar retrasar o evitar el ingreso en la UCI o bien atendiendo a pacientes que no son susceptibles de una medida tan agresiva como la intubación” explica la Dra. Mediano que añade “lo que estamos logrando con éxito es ganar tiempo a que pase la inflamación pulmonar grave y aguda que causa el COVID-19 con la medicación recomendada y un soporte respiratorio adecuado”. Otro de los valores fundamentales de las UCRIs es el apoyo a las UCIS en la salida de los pacientes tras una IOT, o lo que se conoce como el proceso de destete. La existencia de camas de UCRI permite que este proceso pueda realizarse de forma precoz, optimizando el tiempo de estancia en UCI de los pacientes.

Sin embargo, el principal problema de las UCRIs es que los sistemas de apoyo a la respiración que emplean, a diferencia de la intubación que ofrece la UCI, provocan una importante aerosolización y por lo tanto las UCRIs se convierten son espacios altamente contaminantes para el personal a su cargo. Los sistemas ventilatorios empleados no son circuitos cerrados, el paciente exhala a través de mascarillas lo que provocan fugas de aire que lanzan al aire incontables gotitas. “Nuestro nivel de riesgo es máximo, ahora mismo somos las zonas más contaminadas de los hospitales y debemos llevar equipos de alta protección: gafas estancas, doble guante, trajes de buzo/bata impermeables y mascarillas FFP2 o 3”, explica la Dra. Mediano. Disponer de este material es pues fundamental para el correcto funcionamiento de estas unidades, la protección de su personal y el éxito en su estrategia de ayuda a combatir la pandemia del COVID-19.

“Como neumólogos, estamos haciendo un buen trabajo, hemos reaccionado bien y a tiempo incrementado el número de efectivos en las UCRIs y nuestra labor está dando sus frutos, cada vez que un paciente sale recuperado de una de nuestras unidades sin pasar por la intubación es un gran éxito colectivo”, concluye la Dra. Mediano.