“El paciente es un continuo reto porque va cambiando sus necesidades, adaptarse a eso es fundamental”
En esta entrevista para New Medical Economics, José Luis Poveda ha recordado sus más de 15 años como jefe del Servicio de Farmacia del Hospital Universitario La Fe. También ha contado cuáles son las líneas estratégicas para liderar un Servicio de Farmacia de calidad y el camino que debería seguir la Farmacia Hospitalaria para seguir con su desarrollo, entre otras cuestiones.
¿Qué balance hace tras 17 años como jefe del Servicio de Farmacia del Hospital Universitario La Fe?
Trabajar en este Hospital es un privilegio y a la hora de hacer balance, he decir que estoy rodeado de profesionales de excelencia y eso permite hacer cosas que seguramente en otro contexto no se puede hacer. La segunda reflexión es que este balance que al final se hace a título personal es el balance de todo un equipo y de un conjunto de profesionales que nos ha acompañado a lo largo de estos 17 años y que he tenido la suerte de dirigir: profesionales de unas competencias y un talento increíble. Lo positivo y lo que se ha hecho en este
Hospital tiene que ver con este equipo de profesionales.
Es difícil hacer un balance de 17 años, pero haciendo alguna reflexión, decir que siempre he sido una persona que ha intentado soñar porque los sueños al final te hacen ver la posibilidad de un camino, y después hay que trabajar mucho para convertir esos sueños en realidad. Así, te das cuenta de los grandes hitos que hemos conseguido en estos 17 años.
Nosotros fuimos el primer Hospital de la Comunidad Valenciana y quizá de los primeros de España, y desde luego el primero en mayor complejidad, que introducimos toda la prescripción electrónica asistida, que hoy forma parte de la práctica habitual, pero en 2003 era algo inviable y cambió toda la dinámica.
También, sin darnos cuenta, fuimos pioneros en todo el sistema de logística, toda la automatización que hicimos, la dispensación de sistemas automáticos, incluso del modelo logístico: es un modelo logístico donde tenemos una parte externalizada y eso también fue una innovación.
También en el área de preparación, fuimos de los primeros hospitales en tener unas áreas de preparación acreditadas con GMP, realmente con un nivel de calidad de excelencia. Y en el área de pacientes externos, por ejemplo, desde hace mucho tiempo iniciamos toda una estrategia 2.0 que nos ha situado en ser un referente en proyectos desde la página web, YouTube…hasta la referencia de eDruida como proyecto de continuidad y formación a pacientes.
Vamos a ser el primer Servicio de Farmacia que tiene la estructura para adecuar las terapias avanzadas (CAR-T), es decir, que la mayor parte de las terapias avanzadas se están recibiendo en los servicios de hematología que era donde tenían las estructuras para terapia celular. En cambio, en el Hospital y afortunadamente con el apoyo de Dirección, se ha apostado para que sea Farmacia quien haga todo el tema de la conservación, recepción…
Estamos continuamente generando estos sueños y estoy muy satisfecho. Si hago un balance en blanco sobre negro, fuimos de los primeros hospitales acreditados como sistema de calidad, nos han dado muchos premios, hemos recibido durante 7 años el Best in Class, etcétera.
¿De cuántas personas se compone su equipo?
Se compone de 150 personas, de los cuales tenemos 38 facultativos, tenemos personal sanitario no facultativo entre enfermería, auxiliares de enfermería y técnicos de laboratorio. Además, contamos con personal administrativo y un farmacólogo.
¿A qué retos se enfrenta actualmente?
Los retos realmente son los retos a los que tenemos que servir, el primero es el paciente. El paciente es un continuo reto porque va cambiando el tipo de paciente, sus necesidades y, por tanto, adaptarse a eso es fundamental. Los profesionales sanitarios, que también en la interrelación de la medicina ha cambiado muchísimo, y la superespecialización hace que necesitemos complementar cada vez más los recursos, la formación y el valor que los farmacéuticos podemos aportar de una forma diferente. Y el sistema sanitario va cambiando y nos exige también nuevos retos.
En realidad, yo creo que los retos en estos 17 años también han sido cambiantes y es la necesidad de adaptarse a esos retos, como objetivo principal el paciente, pero también al sistema, que hay temporadas que tensiona más desde el punto de vista económico y otras veces menos. Y los profesionales que van buscando un perfil de farmacéutico diferente, colaborador, participativo y que genere valor y conocimiento.
¿Cuáles son sus líneas estratégicas para liderar un Servicio de Farmacia de calidad?
Nosotros tenemos un conjunto de líneas estratégicas que llevan definidas bastante tiempo. El primer eje estratégico es la garantía de calidad total y sobre eso pivota todo el Servicio, todos nuestros proyectos desde institutos de acreditación, las ISO, los sistemas de Best in Class… todo pivota sobre la calidad. De hecho, como es una estrategia tan fundamentada, hemos desarrollado un curso de Lean six sigma, todo el progreso que hemos hecho, no solo es la incorporación de la calidad en farmacia, sino el cómo podemos contribuir a la calidad de todo el hospital y fuera también de él.
El segundo eje que hemos tenido siempre es el tema de la eficacia y la seguridad en los tratamientos, es decir, cómo obtener los mejores resultados de salud en los pacientes evitando la iatrogenia y todas las acciones que se pueden hacer en ese marco.
Hay un tercer ámbito que siempre está encima de la mesa, y es todo el tema de la sostenibilidad. Sobre eso, hemos cambiado muchas áreas que son líneas estratégicas como el entorno tecnológico, el entorno docente, el entorno de investigación y el entorno asistencial…siempre haciendo ingeniería de procesos.
La Farmacia Hospitalaria es un aliado en resultados de salud y en la atención al paciente, ¿cómo se puede reforzar esta teoría?
Esto es una realidad que ya está asentada en mucho cuerpo doctrinal de conocimiento, hay muchas publicaciones, y por tanto, creo que esto ya está refrendado. El gran cambio que hizo esta profesión fue cuando cambió el eje central de su actividad en el medicamento y lo cambió al paciente. Y eso significaba que el farmacéutico de hospital iba a tener una triple visión: centrado en el medicamento, después centrado en el paciente y también en el proceso. Es decir, vamos a mejorar toda la calidad en todos los procesos relacionados con el medicamento, en cómo llega ese medicamento al paciente en términos de seguridad y eficiencia, y después vamos a valorar los resultados de salud en el propio paciente y cómo vamos a contribuir. Esa triple visión es lo que le ha hecho crecer a la profesión.
¿Cómo cree que se podría mejorar la Atención Farmacéutica?
Nosotros tenemos que incorporar algo que tiene que ver con la teoría de la relatividad y es que tenemos que cambiar nuestro concepto de espacio y tiempo. Tenemos que ser cada vez más proactivos, tenemos que estar en los núcleos de la decisión cuando se aplica la terapéutica y también tenemos que cambiar el concepto del tiempo a lo largo de, no solo el recorrido en ese momento sino cómo vamos a seguir con el paciente en todo el proceso asistencial, no únicamente en el proceso de hospitalización. Por eso, ese cambio del espacio también es fundamental, hay que dar continuidad en el tiempo y, sobre todo, y lo vemos a través de pacientes externos, hay que dar profundidad en el tiempo. No es el momento de la asistencia en consulta sino el de incorporar al paciente en esa continuidad asistencial con el profesional.
¿Cuántos ensayos clínicos se están realizando en La Fe? ¿Cuál es vuestra implicación en este ámbito?
Nosotros tenemos más de 600 ensayos clínicos activos y realmente nuestra implicación es en todo el proceso del circuito farmacoterapéutico, desde la aprobación por los comités hasta todo el proceso de adquisición, acondicionamiento, preparación, dispensación y en la valoración de resultados. Ahí en la incorporación no solo del Servicio de Farmacia, ya estamos incorporando un programa centinela que es de monitorización de pacientes con ensayo clínico, y permite a todo el conjunto del Hospital saber que ese paciente está con ensayo clínico y, por tanto, tener unas precauciones especiales. En el contexto, no de ensayo clínico, sino de entrar en otro proceso asistencial que no tenga nada que ver con su ensayo clínico. El núcleo fundamental de los ensayos clínicos es de oncohematología. Aquí los dos servicios más potentes en ensayos clínicos son hematología y neurología.
¿Os llegan los resultados de los ensayos clínicos?
Nos llegan al final, con las publicaciones. Pero es lo que comentaba, ese programa de seguimiento que nos permite monitorizar la situación de cada paciente nos permite ver a cada paciente en su contexto de ensayo clínico, pero fuera del contexto también. Si un paciente está en ensayo clínico, mañana se cae y tiene una fractura, y llega a la puerta de urgencias, si no está monitorizado no sabes qué fármaco puedes darle o sí. Es decir, la monitorización de los resultados del ensayo clínico lo vemos por la propia validación del programa de OrionClinic.
¿Qué función desempeña la Farmacia Hospitalaria en la evaluación y selección de medicamentos en los Comités FCT de las CCAA?
Hay una participación muy activa, teniendo en consideración que gran parte de la formación que reciben los farmacéuticos tiene que pasar por un proceso de evaluación y selección a través de diferentes modelos. En el propio Servicio tenemos al coordinador del grupo Génesis, con toda la metodología que eso supone y, por tanto, es un valor para la incorporación de nuevos medicamentos en la Comisión de Farmacia. Muchísimos farmacéuticos que trabajan aquí forman parte de diferentes subcomités a nivel central.
¿Qué camino debería seguir la Farmacia Hospitalaria para seguir con su desarrollo?
Creo que tiene que seguir poniendo el eje en lo que es la aportación de valor en el paciente y en la obtención de resultados.
¿Qué necesidades tiene en estos momentos la Farmacia Hospitalaria para seguir desarrollándose (formación en … u otros temas)?
Tenemos más necesidades de recursos humanos. La ampliación de las funciones de los servicios de farmacia, la incorporación en los equipos, la participación multidisciplinar…también exige realmente una cantidad de recursos humanos importantes. El sistema es consciente de la necesidad de la aportación de valor, pero hace falta también acompasar lo que son las necesidades con las expectativas. No se pueden buscar solo expectativas si después no hay recursos para cubrirlas.