El Hospital Sant Joan d’Alacant ha acogido recientemente el Encuentro de Expertos “Diseño y mejora del proceso asistencial del paciente con cáncer urotelial”, organizado por New Medical Economics en colaboración con Astellas Pharma.

La jornada tuvo como propósito analizar la situación actual y explorar estrategias para optimizar cada eslabón del proceso asistencial en una patología de alta incidencia como el cáncer de vejiga. El evento, cerrado al público, se convirtió en un espacio de reflexión y colaboración en el que se destacó la importancia de una coordinación estrecha entre Atención Primaria, Urología, Oncología, Enfermería y Calidad Asistencial, así como el compromiso por una atención más humanizada y eficaz.

Durante la sesión, el moderador José María Martínez García, presidente de New Medical Economics, abrió el debate subrayando que “el objetivo no es señalar defectos, sino compartir experiencias y enseñar para impulsar una mejora continua en los procesos asistenciales”.

A partir de este planteamiento, las intervenciones de los ponentes fluyeron de manera natural. Juan Antonio Marqués Espí, gerente del Departamento de Salud, destacó la importancia de trabajar de forma conjunta para el bienestar de los pacientes, afirmando que “trabajamos por su salud y es imprescindible contar con un equipo comprometido”. Esta declaración se vio reflejada en la forma en que todos los participantes compartieron sus experiencias y desafíos.

Por su parte, Norma Iranzo García, subdirectora médica, resaltó la solidez de los protocolos implementados al comentar que “el proceso está bastante bien protocolizado y el seguimiento al paciente se lleva a cabo con un compromiso absoluto”, lo que evidenció la base organizativa sobre la que se apoya el sistema asistencial.

En esta línea de coordinación interdisciplinaria, Manuel Ortiz Gorraiz, jefe del Servicio de Urología, explicó que “la coordinación entre servicios permite un seguimiento muy sistematizado, fundamental para un manejo adecuado de la patología”, subrayando además la importancia de adherirse a las guías europeas y protocolos consensuados.

El desafío del infradiagnóstico

Uno de los puntos cruciales debatidos fue la dificultad para detectar el cáncer urotelial en fases tempranas, lo que conduce al infradiagnóstico. Varios expertos subrayaron que, en muchas ocasiones, los síntomas sutiles y la falta de protocolos de cribado adecuados pueden retrasar el diagnóstico, incrementando la incertidumbre y el impacto emocional en los pacientes. Concepción Fernández Planelles, directora de Atención Primaria, destacó la importancia de mejorar los métodos de detección precoz: «La detección temprana es fundamental, y el uso correcto de las pruebas permite una remisión ágil y oportuna hacia el servicio hospitalario.»

Este aspecto fue complementado por los representantes de los pacientes, quienes relataron que en ocasiones se sienten desorientados ante la falta de información clara y la demora en obtener un diagnóstico preciso, lo que agrava la carga emocional y dificulta el inicio oportuno del tratamiento.

En este punto también se destacó la concienciación acerca del tabaco y su relación con la prevalencia con el cáncer de vejiga. Antonio López Gímenez, facultativo especialista en Oncología Médica, contó que en las consultas tratan de concienciar, pero en casa también tienen que ayudarles a dejar de fumar, sirviendo de ejemplo.

Optimización de recursos y humanización

La optimización de recursos fue otro de los temas clave de la jornada. Nieves Díaz Fernández, jefa del Servicio de Oncología Médica, destacó que “contamos con recursos adecuados para un proceso correctamente protocolizado, aunque siempre hay margen de mejora”, lo que evidenció el compromiso por avanzar en la mejora continua. Por su parte, Verónica Amat Puig, directora de Enfermería, enfatizó el valor del trabajo en equipo y la implicación del personal, señalando que “aunque necesitamos más recursos, el feeling y el compromiso del equipo hacen que los resultados sean cada vez mejores”. En un sentido similar, Juana Requena Puche, facultativa de la Unidad de Calidad, subrayó la necesidad de reforzar la seguridad del paciente mediante una comunicación efectiva y una notificación rigurosa de los incidentes adversos debidos a la asistencia, lo cual es esencial para ajustar y perfeccionar los protocolos existentes.

El componente humano del proceso asistencial también fue resaltado durante el encuentro. Jose Antonio Valera Lorenzo, especialista en Medicina Familiar y Comunitaria, hizo hincapié en la importancia de la implicación de todos los profesionales para lograr una atención personalizada que responda a las necesidades reales del paciente. Asimismo, Patricia Sánchez Serrano, supervisora de Enfermería de Hospitalización, expresó que “nuestro departamento apuesta por la humanización del trato, haciendo que cada paciente se sienta verdaderamente respaldado en todo momento”, enfatizando que la calidad asistencial se mide no solo en protocolos, sino también en la calidez del trato. Complementando estas intervenciones, Marta Fernández de Mesa Carrillo, especialista en Psicooncología de la Asociación Española Contra el Cáncer, destacó el papel crucial del apoyo emocional, afirmando que “la figura del psicooncólogo es esencial para acompañar al paciente y al familiar”.

Las voces de los representantes de los pacientes, como Juan Luis Sevillano Briones y Francisco Javier Alcaraz, aportaron una perspectiva vivencial que reafirmó la importancia de la rapidez en el diagnóstico, la coordinación entre los profesionales y, sobre todo, la calidad humana en el trato. Según ellos, sentirse acompañado y contar con un equipo comprometido fue determinante para afrontar la enfermedad y recuperar la confianza en el sistema asistencial.

Conclusiones

En definitiva, la jornada en Alicante se configuró como un foro dinámico y colaborativo en el que la experiencia y el compromiso de un equipo multidisciplinar se fusionaron para delinear estrategias que mejoren de forma integral el proceso asistencial del paciente con cáncer urotelial. Como síntesis del encuentro, Juan Antonio Marqués Espí concluyó: “Durante el encuentro ha quedado de manifiesto que una atención sanitaria de calidad y que pretenda alcanzar la excelencia, no puede estar basada exclusivamente en la competencia técnica y el conocimiento científico. Esos aspectos son esenciales, pero hoy en día la sociedad nos demanda que demos protagonismo a los pacientes, que tengamos en cuenta sus preferencias y, con visión más amplia, conozcamos y evaluemos su experiencia a lo largo de todo el proceso asistencial. El abordaje multidisciplinar a través de los comités oncológicos y el trabajo en equipo siguen siendo fundamentales para ofrecer al paciente los mejores resultados a nuestro alcance. E insistir en que la vertiente humana y afectiva de la asistencia debe estar presente en todo momento”.